Pocos sonidos son más molestos que el zumbido de un mosquito. Escucharlo nos desvela y nos pone sobre aviso. Miramos alrededor e intentamos localizar al insecto para darle caza antes de que nos pique. Su sonido puede llegar a enloquecernos, de ahí el proverbio africano “si crees que eres demasiado pequeño para hacer grandes cosas, intenta dormir con un mosquito en una habitación”, sin embargo es música para un mosquito.

Sorprendentemente, pese a su pequeño tamaño, los mosquitos son los insectos con un mayor número de neuronas en el órgano de Johnston, que sería el equivalente a nuestro sistema auditivo. En el caso del mosquito de la fiebre amarilla (Aedes aegypti) se ha contado que los machos tienen más de 15.000 neuronas, mientras que las hembras disponen aproximadamente de la mitad de neuronas dedicadas a captar e interpretar los sonidos. Disponen de un “oido” extremadamente sensible pues es esencial para su reproducción. El zumbido que nos pone tan nerviosos para ellos puede ser un canto de amor.

Los mosquitos cantan antes de aparearse

Cuando se analiza el zumbido de los mosquitos, se aprecia que los machos al volar emiten un sonido de unos 600Hz. Las hembras tienen un tono mucho más bajo, alrededor de los 400Hz. En parte se debe a la diferencia de tamaño entre unos y otros: las hembras son más grandes, sus alas también, de manera que no tienen porque batir las alas tan rápido como los machos para mantener su vuelo. Fíjate en el vuelo de pájaros de alas grandes y pequeñas, y verás que la frecuencia con la que baten las alas es muy distinta. Lo mismo pasa entre machos y hembras de una misma especie de mosquitos. Sin embargo, cuando se juntan machos y hembras sucede algo sorprendente: ajustan sus frecuencias para poder producir un tono común que puede alcanzar los 1.200Hz.

Fig. 1. Figura que representa el encuentro entre un macho y una hembra de mosquito de la fiebre amarilla, donde ambos sexos ajustan sus frecuencias para alcanzar el mismo tono. Créditos del Gif: Stephanie Swart para TED: DIY Neuroscience – Mosquito, basado en los resultados de Cator et al. 2009. Science 232: 1077-1079

Hasta no hace tanto se pensaba que los insectos eran grandes maestros de la sincronización y el ritmo a la hora de aparearse, basta con pensar en los conciertos veraniegos de cigarras y grillos, pero que no controlaban mucho el tono, sin embargo los mosquitos sí lo hacen. De hecho, cuando ambos sexos ajustan sus frecuencias, el intervalo entre el tono del mosquito macho y el de la hembra se acerca mucho a los que los músicos llaman una quinta perfecta. Durante siglos, los compositores consideraron que el intervalo de quinta era el más eufórico de todos, algo que parece funcionar en el caso de los mosquitos: si el macho logra crear un dueto con la hembra, creando un intervalo de quinta, las probabilidades de ser escogido y reproducirse se multiplican. En otra palabras, la hembra tiende a elegir al macho que mejor canta su dúo.

¿Podemos desarmonizar sus zumbidos?

Los machos de muchas especies de mosquitos suelen formar enjambres en los que entran las hembras para escoger uno. Estos enjambres pueden formados por decenas o cientos de machos, variando entre especies, pero en todos ellos son un entorno sonoro que dificulta la comunicación entre la hembra y un macho. ¿Cómo se comunican y recrean su dúos particulares cuando a su alrededor hay tanto ruido? Sus sistemas auditivos han evolucionado de tal manera que machos y hembras también difieren en el proceso de filtrado, la amplificación y el procesamiento del sonido, permitiendo a cada sexo centrarse en la información más relevante.

Todo este conocimiento, más allá de por el placer del saber, se estudia para buscar los puntos débiles de los mosquitos sobre los que poder actuar a la hora de gestionar sus poblaciones. No son pocos los trabajos que apuntan que el sistema de comunicación y los sistemas auditivos de los mosquitos pueden ser objetivos viables en futuros programas de control. ¿Se editarán genéticamente mosquitos que no se “escuchen” entre ellos y no se reproduzcan? ¿Se encontrarán maneras de interferir la comunicación entre machos y hembras?


Referencias

Cator LJ, Arthur BJ, Harrington LC, Hoy RR. 2009. Harmonic convergence in the love songs of the dengue vector mosquito. Science 323: 1077-1079

Gage G. 2018. The real reason why mosquitoes buzz. DIY Neuroscience TED series

Gibson G, Russell I. 2006. Flying in tune: sexual recognition in mosquitoes. Current Biology 16: 1311-1316

Robert D. 2009. Insect bioacoustics: Mosquitoes make an effort to listen to each other. Current Biology 19: R446-R449

Su MP, Andrés M, Boyd-Gibbins N, Somers J, Albert JT. 2018. Sex and species specific hearing mechanisms in mosquito flagellar ears. Nature Communications 9: 3911