Un puente contra las arbovirosis: Mosquito Alert en Río de Janeiro

Este septiembre y octubre de 2025, dos miembros del equipo de Mosquito Alert han viajado hasta Río de Janeiro para llevar a cabo una estancia internacional.  La oportunidad se enmarca dentro del proyecto INOVEC, un proyecto europeo de Staff Exchange, que conecta centros de investigación y empresas de todo el mundo, para impulsar nuevas estrategias de control de las arbovirosis – enfermedades transmitidas por mosquitos – como el dengue, el Zika, la fiebre amarilla o el chikungunya. 

La estancia ha coincidido con un seminario internacional celebrado en la ciudad del 19 al 21 de septiembre: “Strengthening North-South research cooperation in social sciences for protecting vulnerable populations from Aedes-borne diseases”.

El objetivo principal era fortalecer la colaboración entre equipos de investigación y centros del Norte y el Sud Global, y compartir conocimiento para proteger mejor las poblaciones más vulnerables ante los mosquitos del género Aedes y las enfermedades que transmiten a través de técnicas innovadoras dentro del mundo de las ciencias sociales. Durante los dos días se presentaron proyectos que se llevan a cabo en centros de investigación situados en todo el mundo: Cuba, Colombia, Tanzania, Burkina Faso, Uruguay, Francia o el Reino Unido, además de la participación del CEAB-CSIC como representante de Mosquito Alert. También se organizó una mesa redonda sobre los retos y oportunidades de la participación comunitaria en el control de enfermedades transmitidas por vectores.

Uno de los puntos del programa fue presentar Mosquito Alert, una plataforma de ciencia ciudadana que permite vigilar y monitorizar mosquitos que pueden transmitir este tipo de enfermedades a tiempo real.

El secondment, esta estancia de un mes dentro de INOVEC, se llevó a cabo en la Fundação Oswaldo Cruz (FIOCRUZ), todo un referente en investigación en salud pública en el Brasil. Los dos miembros de Mosquito Alert participantes han estado:

Jesús Bellver –  Predecir donde atrapar mosquitos para mejorar la vigilancia

Jesús, investigador postdoctoral del CEAB-CSIC, ha hecho la estancia en el grupo dirigido por Ademir Martins en el Laboratorio de Biología, Control y Vigilancia de Insectos Vectores (LBCVIV).

Este equipo hace más de 20 años que estudia la biología, genética y fisiología de los mosquitos que pueden transmitir enfermedades. También desarrollan tecnologías innovadoras para mejorar la vigilancia y control de los vectores.

Durante este mes, Jesús ha desarrollado modelos espacio-temporales de alta resolución para comprender como se distribuyen las poblaciones de mosquitos en el entorno urbano. El objetivo de esto es poder llegar a optimizar la estrategia de colocación de trampas por así tener más éxito en la hora de captarlos. Está adaptando estos modelos a las particularidades de Maré, una de las favelas más grandes de Río y más cerca de FIOCRUZ, donde la institución también, lleva a cabo algunas investigaciones como, por ejemplo, el proyecto entomofavela.

Mar Jambou – Tándem de ciencia ciudadana y ciencias sociales

Mar ha colaborado con el grupo de Marcia Freitas Lenzi, especialista en Salud Colectiva y en el impacto social de las epidemias y la vulnerabilidad asociada a las desigualdades sociales. En este grupo también hay Gabriela Azevedo, investigadora con una larga trayectoria en proyectos sociales relacionados con la infancia, la igualdad de género y la prevención de violencias.

El objetivo principal de su estancia ha sido evaluar si Mosquito Alert se podría implementar dentro del contexto brasileño. Por eso, se han adaptado y traducido al portugués, unas encuestas diseñadas inicialmente en Tanzania (durante un secondment previo de otro miembro del equipo, Enric Pou).

Mar ha formado a tres trabajadores de FIOCRUZ (trabajadores del proyecto Entomofavela) para que sean ellos quien realicen las encuestas entre la comunidad de FIOCRUZ.

Después de esta gran experiencia, vuelven con una idea muy clara: este tipo de estancias demuestran que la investigación en salud pública es más potente cuando se hace en red, compartiendo experiencias e innovaciones entre territorios.